Nelda Pérez
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Por Natalia Otero
Todo aquel que visita el restaurante El Toro pregunta por los clásicos Tex-Mex y por Nelda Pérez.
Este 14 de enero, Nelda Pérez cumple 44 años trabajando como mesera en el restaurante fundado por la familia Ybarra. Eugene Ybarra y su esposa Alice abrieron el primer local en 1960 y, unos años más tarde, Nelda entró por las puertas de El Toro.
Desde entonces, supo que sería su único trabajo, pues se sintió como en casa. Cuando empezó, los hijos de los Ybarra eran adolescentes, hoy en día, son ellos los que manejan El Toro.
“Son una familia maravillosa para trabajar, los considero como mi propia familia. Desde que entré, no he tenido que mirar para atrás, siempre hacia adelante, contando con su apoyo, en las buenas y en las malas”, dice.
Nelda es sobreviviente de cáncer. En 2017, fue diagnosticada y, tras años de lucha y valentía, el mes pasado recibió la noticia de que había superado la enfermedad. Si no fuese por el apoyo de la familia Ybarra, su destino habría sido diferente.
VIVIR LA VIDA AL MÁXIMO
Nelda tiene una hija, un hijo y una nieta, y lo que más le gusta hacer con ellos es cocinar. Su especialidad son los tamales.
Pero, su vida no solo gira alrededor de la gastronomía. Por los desafíos que Nelda ha enfrentado, está convencida de que la vida hay que vivirla al máximo cada día. Siguiendo su alma aventurera, Nelda suele pasear en motocicleta y descubrir todo tipo de paisajes con su esposo.
Es gracias a sus ganas de vivir y su buena actitud, que Nelda deslumbra a todos los que atiende.
“Cuando los clientes entran por esas puertas, son la bendición que Dios manda. Y a mí me hace feliz ver a la gente venir, irse y volver, mientras que yo sigo aquí”, asegura.
Deseando miles de “mini Neldas”, su manager John Mayes, dice que: “Cuando Dios hizo a Nelda, rompió el molde”.
Nelda planea seguir trabajando en El Toro hasta que “Dios le de vida”, pues cada año reafirma que trabajar ahí es una bendición.La perseverancia y el carisma de Nelda, también hacen que la presencia de esta leyenda sea una bendición para El Toro.