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Este artículo apareció originalmente en un suplemento digital especial sobre la venta de cerveza y vino.
Por Kathleen Furore
¿Es la moda del bajo/ningún alcohol (NA) sólo una moda pasajera? ¿O ha llegado para quedarse?
Es una pregunta que cualquiera que se encargue de ordenar el inventario del bar en restaurantes mexicanos y latinos probablemente se esté haciendo al oír términos como "curiosidad sobria" y ver "eventos" como el Enero Seco, que se ha convertido en un periodo de tiempo muy comentado en el que los consumidores renuncian a todo lo relacionado con el alcohol para empezar el nuevo año.
Según una investigación reciente de la plataforma de análisis del consumidor Veylinx, la charla sobre la abstinencia del alcohol es algo más que una moda de las redes sociales.
"Más de tres cuartas partes de los estadounidenses afirman haber renunciado temporalmente al alcohol durante al menos un mes en el pasado", informa Veylinx, que señala que el 46% de los bebedores está intentando reducir su consumo de alcohol y que el 52% de ellos está sustituyendo el alcohol por bebidas sin alcohol.
Se trata de una tendencia que se está abriendo camino en el ámbito de la restauración, según Victoria Novo, directora nacional de ventas de Goya Foods, Inc.
"Hemos observado un mayor interés de nuestros clientes por los vinos desalcoholizados, sobre todo desde hace aproximadamente un año", afirma Novo. "Los consumidores ven estos productos como opciones de bebidas de gran sabor y más saludables que mejoran su experiencia gastronómica. Por ejemplo, nuestros vinos Tres Ceros tienen las propiedades beneficiosas que ofrecen los vinos normales, como polifenoles, antocianinas y antioxidantes. Y como están desalcoholizados, atraen a los consumidores que no quieren o no pueden tomar bebidas con todo el alcohol. También tienen sólo la mitad de calorías que el vino normal, y además son veganos y no contienen gluten ni azúcar".
Un desglose demográfico y por categorías
Los datos de Veriflex no son los únicos en lo que se refiere al movimiento hacia el consumo de bebidas sin alcohol. La información de la plataforma de comercio electrónico de bebidas alcohólicas Drizly se hace eco de esos datos.
"El deseo de probar bebidas sin alcohol sigue aumentando, y la mitad de los encuestados ha probado la cerveza, el vino o los licores sin alcohol", señala el Informe de tendencias de consumo de Drizzly para 2023.
El desglose demográfico es interesante y puede ayudar a informar a los restaurantes y bares que intentan decidirse por una línea de NA que tenga más sentido para su establecimiento.
Según Drizly, la categoría NA "está despertando el mayor interés entre la Generación Z y los Millennials, que han probado estas bebidas con más frecuencia que otras generaciones, así como entre los hombres, que declararon beber cerveza, vino o licores NA con más frecuencia que las mujeres".
Kantar Global MONITOR informa de hallazgos similares, ligeramente matizados.
"Aunque la Generación Z es la que menos bebe alcohol entre las generaciones, los Millennials son actualmente los consumidores más propensos a beber cervezas y licores con o sin alcohol", dicen los datos de Kantar.
La cerveza y el vino, según los datos, son las dos categorías que impulsan el movimiento de bajo/ningún alcohol
En el comercio minorista, por ejemplo, "la cerveza está preparada para impulsar el crecimiento general de las ventas sin alcohol", según el Informe sobre el comercio minorista 2022 de Drizly, que muestra que "casi el 61% de los encuestados señalaron la cerveza como el producto sin alcohol que piensan almacenar más el próximo año, casi 30 puntos por delante del vino, que ocupa el segundo lugar".
El Informe de Tendencias de Consumo 2023 de Drizly se hace eco de estos resultados.
"Aunque la cerveza sin alcohol sea la bebida sin alcohol preferida del momento... de cara al futuro, los encuestados sienten más curiosidad por probar el vino sin alcohol en 2023", afirma dicho informe.
Liz Paquette, responsable de Consumer Insights de Drizly, resume el mercado de esta manera: "...las preferencias de los consumidores están cambiando en lo que respecta a la cerveza, el vino y los licores: cada vez más estadounidenses, especialmente la Generación Z y los millennials, se inclinan por las opciones sin alcohol...".
Es algo a tener en cuenta a la hora de planificar un menú de bar que genere pedidos de bebedores con y sin alcohol por igual.
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